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Sabemos que Youtube es el segundo motor de búsqueda más potente del mundo y el vídeo es el formato con mayor alcance de audiencia en este momento
Cuando nos hablan de un canal exitoso de Youtube, inmediatamente imaginamos una persona joven, «influencer», con toneladas de suscriptores, que las marcas contratan para que recomiende productos a su audiencia. Pero, si no somos «influencers» ¿ qué puede aportarnos mantener un canal de Youtube en nuestra actividad como formadores?
Objetivos de un canal de Youtube con contenidos educativos y/o formativos
En primer lugar, debemos tener en cuenta que el éxito o repercusión de un contenido en vídeo subido a Youtube no depende solamente del carácter, carisma o popularidad de la persona o personas que aparecen en las piezas; sino, como siempre en el marketing de cotenidos, el interés y fidelización que generen depende de que cubran una necesidad práctica o solventen un problema a tu público objetivo (observa que en este caso no estamos hablando de vídeos de entretenimiento). De hecho, hay canales de vídeo muy populares en los que normalmente no aparece su autor, como Quantum Fracture, un canal educativo con vídeos sobre Física que actualmente supera el millón de suscriptores con más de 45 millones de visualizaciones de sus vídeos. Y decimos «normalmente», porque hay unos tipos de vídeos concretos en los que el profesor creador de este canal sí «da la cara»
Lo cual nos lleva directamente a la segunda premisa a tener en cuenta a la hora de valorar la creación de un canal de Youtube dentro de nuestra estrategia de marketing online: no se trata solamente de subir grabaciones de nuestros cursos o lecciones, sino también podemos crear por ejemplo un vlog (la filosofía de un blog aplicada al formato vídeo), vídeos de ayuda o de «how to», micropíldoras, demostraciones…en fin, contenidos diversos con el denominador común de tu temática formativa y el único límite de tu creatividad.
Y, por supuesto, todo esto tendremos que hacerlo con un objetivo en mente: lo que esperamos que el canal de Youtube aporte a la evolución de nuestra actividad como profesores online. Un ejemplo puede ser monetizarlo: hay diversas formas, aunque debemos tener en cuenta que todas ellas requieren un número muy elevado de suscriptores. Pero más allá de la monetización, existen otras posibles aplicaciones de un canal de Youtube con nuestros contenidos educativos, tales como hacer crecer nuestra marca personal de forma que puedan terminar contratándonos para charlas o talleres presenciales; o bien que lo ameno de nuestras explicaciones haga que los alumnos quieran consultarnos sus dudas personales (lo que, normalmente, significa que podremos recibir honorarios por resolverlas) e incluso puede darse la circunstancia de que a partir del canal de Youtube lleguemos a construir una comunidad altamente motivada por formar parte de nuestro membership site.
Dicho lo cual, vamos a ver algunas sugerencias para conseguir un canal de Youtube profesional que te ayude a ampliar tu audiencia con un esfuerzo mínimo pero constante.
Optimizando el aspecto del canal y de los vídeos
Estos son algunos consejos básicos para que puedas iniciar un canal de vídeos educativos o formativos, que sentará las bases de tu marca personal en Youtube:
Crea una página de inicio profesional
La mayoría de las personas, después de ver uno de tus videos, sentirán curiosidad por explorar tu canal de Youtube. ¡La impresión que crees en sus mentes en los primeros siete segundos es fundamental! Si deseas que se suscriban, la página de inicio del canal debe ser lo más atractiva y profesional posible. Por lo tanto, trata tu canal de youtube como parte de una estrategia de marca, haciéndolo coherente con el resto de experiencias que ofrezcas a tus alumnos potenciales (página web, lead magnet, presencia en redes sociales…) Un ejemplo de canal educativo en Youtube de aspecto sumamente profesional a la vez que práctico es éste canal de vídeos para aprender inglés
Haz que las miniaturas de tus vídeos sean irresistibles para hacer clic
Si eres capaz de pensar durante horas en ideas para crear magníficos títulos de blog, deberías ponen el mismo empeño en crear las miniaturas de tus vídeos. Las miniaturas son para vídeo, lo que el título es para los blogs: una carta de presentación que invita a abrir el contenido, por lo tanto, todo el esfuerzo que pongas para crear tu vídeo se desperdiciará si tus potenciales alumnos no hacen clic.
Aquí sugerimos algunas acciones que puedes llevar a cabo para crear miniaturas de vídeos que inviten a hacer clic:
- Elige un estilo en particular y sé fiel a él. Ello ayudará a hacer que tus videos sean más reconocibles a lo largo del tiempo.
- Utiliza en lo posible los colores de tu marca o afines.
- Cuida la resolución: la dimensión incorrecta puede hacer que las miniaturas se vean con incomodidad o pixeladas.
- Pon un rostro solo cuando resulte coherente. La neurociencia ha demostrado que el ojo humano se siente atraído por rostros humanos en lugar de texto o cualquier otro gráfico. ¡Pero eso no significa que coloques una plantilla fija de tu cara en cada miniatura! Especialmente porque existe otro fenómeno, denominado «ceguera atencional«, que consiste en que cuando vemos varias veces el mismo objeto o imagen en el mismo contexto terminamos por no prestarle atención. Así es que, si vas a usar tu rostro (u otros), adopta diferentes expresiones que rompan la monotonía, pero siempre que combinen con el tema de tu vídeo. Ejemplo de una vloggera educativa que coloca habitualmente su imagen en las miniaturas de los vídeos, lo puedes ver en este canal sobre animación a la lectura, cuentos y recursos educativos
- Tamaño del texto: recuerda, las miniaturas son pequeñas, se ven pequeñas. El texto debe formar una parte significativa de la miniatura, sin ser demasiado pequeño pero tampoco llevarse todo el protagonismo.
- Experimenta con varios estilos para ver cómo las personas responden a cada uno en particular. Puedes ir modificando su diseño en función del conocimiento que ganes con el tiempo.
La importancia del intro y el outro
Una sección de intro y outro genial para todos tus videos te ayudará a hacer reconocible tu canal. Si se hace de forma poco común, además, puede reducir notablemente lass tasas de rebote de tu video.
Un ejemplo de intros y outros poco comunes y completamente integradas con la temática y la marca del canal, lo puedes ver en los videos de la Sala de Profesores del canal La Eduteca.
Atrayendo y fidelizando a los visitantes
Cuida la frecuencia de carga y la constancia
Subir algunos vídeos y después dejar abandonado el canal hasta la próxima ocasión, no es una buena idea si quieres adquirir y conservar una base importante de suscriptores.
No hay que olvidar que la clave de cualquier relación es la consistencia. Por lo tanto -lo mismo que sucede con tu blog- para que tus seguidores no pierdan interés debes nutrirlos de forma regular con videos de calidad.
Por otro lado, ten en cuenta que más videos significan más minutos consumidos en tu canal. lo cual transmite una fuerte señal a Youtube de que tu canal es serio; ello aumenta la posibilidad de que tus videos aparezcan en la primera página de los resultados de búsqueda. Una vez que tu canal aparezca en primera página, obtendrás aún más audiencia y, seguramente, más suscriptores. Si tu contenido es bueno, las personas comenzarán a compartir tus videos y el proceso se retroalimentará de forma constante.
Olvídate del mejor momento universal para subir vídeos a Youtube
Algunos «expertos» hacen correr la voz períódicamente sobre lo importante que es conocer el momento óptimo de incorporación de cada nuevo vídeo a nuestros canales para obtener el máximo alcance. Si lo piensas bien, seguir estas recomendaciones no tiene mucho sentido: imagina que mil emprendedores online leen este «consejo de experto«. Pronto, todos subirán videos en ese momento y el tuyo se perderá entre la multitud.
Estos «consejos sobre la mejor hora para subir vídeos a Youtube» suelen indicar que se basan en algún estudio. Pero tan pronto como finaliza el estudio, la franja horaria recomendada se convierte en el peor momento para subir, ya que probablemente cientos de profesores más hayan tenido la misma idea. Además, es posible que los resultados de ese estudio no se apliquen a la temática y al público objetivo de tu canal.
La única forma de encontrar lo que funciona para tu canal es experimentar. Después de un par de meses, comenzarás a ver tendencias y patrones; así es cómo encontrarás el mejor momento para subir tus vídeos.
Y no sólo eso: el momento óptimo para publicar tus vídeos en Youtube puede cambiar a lo largo el tiempo. El hecho de que algo funcione para ti ahora no significa que seguirá siendo lo mismo siempre. Así que sigue experimentando de vez en cuando, especialmente si detectas una caída en la audiencia.
No se te ocurra descuidar las listas de reproducción
¿Cómo conviertes a tus espectadores por primera vez en suscriptores de por vida? Uno de tus grandes aliados son las listas de reproducción de vídeos.
La mayoría de las personas que visitará tu canal para ver más de tus videos, lo hará con una idea en mente sobre lo que quiere encontrar o resolver. Por eso necesitas construir listas de reproducción atractivas y claras en las que categorizar tus vídeos, especialmente según su cantidad vaya creciendo.
Las listas de reproducción de videos son una herramienta potente similar a agrupar todo el contenido de una biblioteca en distintas estanterías según temáticas o especialidades (o lo que tú prefieras) lo que lo hace más fácil de explorar para los visitantes primerizos.
Un contenido organizado en listas de reproducción que ahorren tiempo y esfuerzo a tus potenciales alumnos, tiene mayor probabilidad de convertirlos en suscriptores leales.
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